Publicado en el periódico
diagonal / octubre 2013
ALTERNATIVAS DE CONSUMO
Sábado de mercado
La Regüerta Ecológica organizó el sábado 19 de octubre el último encuentro del Mercado Agroecológico de Gines, que cada cita se topa con más personas interesadas en una nueva forma de consumir y habitar.
El pasado sábado 19 de octubre, que parecía dar la bienvenida al otoño, abrió también puertas al Mercado Agroecológico de Gines, un espacio que cita a hacedores y público que busca comer, consumir y actuar (vivir en fin) a un ritmo distinto.
El parque municipal del pueblo metropolitano ha acogido puestos de verduras, información y productos variados a los que se acercaban los curiosos en peregrinaje, levantando la cabeza para mirar por encima de las decenas de hombros que se congregaban mirando y conversando con los productores que ordenaban el fruto de su trabajo en las mesas.
Es un consumo de tú a tú, sin intermediarios, ni de distribución ni químicos, que trae al natural las cestas que vienen de tierras de la zona de Sevilla y otros fardos variopintos de panes, quesos, ropa o cosméticos artesanos. En el paseo encuentras charlas sobre energía renovable, animaciones infantiles y ambiente anticipado de domingo.
La cita no es más que una reunión extraordinaria de lo que todas las semanas pasa en la Torre de las Cigüeñas, junto al parque del mercado, lugar que la Regüerta Ecológica, responsable de la iniciativa, ha elegido como punto de encuentro para que productores y consumidores asiduos se encuentren e intercambien pedidos. A esto se suman las habituales reuniones en el mismo parque donde se intenta dar forma a nuevas propuestas de la mano de todos.
El cóctel de consumo local, ecológico, siguiendo el ritmo de la tierra y no el que nosotros queremos infligirle, está en la base de este proyecto, que a pocos kilómetros de la capital seha abierto un hueco descentralizado. El pueblo metropolitano ha construido su propio núcleo, traicionando la etiqueta de ciudad-dormitorio que es fácil apuntalar al Aljarafe.
El grupo de consumo ha abierto una red respetuosa con el medio y con lo que entienden por una forma de vida con calidad, de debate y de diálogo con el lugar que habita. En definitiva, la Regüerta propone un ritmo que no es desarrollo creciente, sino suave ciclo.
